La Iglesia de Scientology regresa a la Cuna de la Humanidad para abrir una nueva Iglesia ideal en Johannesburgo Norte, Sudáfrica.
A solo una hora al noroeste de Johannesburgo, los investigadores han descubierto los fósiles más antiguos en la Tierra, los cuales tienen 3.5 millones de años, en un área ahora conocida como la “Cuna de la Humanidad”. La vida como la conocemos se puede rastrear ahí.
Actualmente, mirando hacia adelante, está Johannesburgo, ubicada en la más poblada de las nueve provincias de Sudáfrica, siendo el hogar de una nueva y vibrante civilización, libre de los males del apartheid y floreciendo como una región culturalmente rica de tecnología avanzada y profesionales del arte. Y dentro de la provincia de Gauteng está el Distrito de Randburg, donde ahora hay una nueva clase de Cuna para la Humanidad: la nueva Iglesia Ideal de Scientology de Johannesburgo Norte, que fue oficialmente inaugurada a finales de diciembre.
“No hay lugar en la Tierra que ocupe un lugar en mi corazón como su África”, dijo el Presidente de la Junta de Religious Technology Center, el Sr. David Miscavige, a la multitud de más de 1500 scientologists e invitados. “Este lugar primigenio, esta cuna del mundo”. La nueva Iglesia, dijo: “es una expresión perfecta de arquitectura de las Iglesias ideales, y refleja perfectamente los modelos básicos del universo… para una nueva civilización que comienza ahora mismo”.
La nueva Iglesia tiene casi 6500 metros cuadrados y se encuentra sobre dos acres, a lo largo de una concurrida calle, adornada con un jardín exuberante. Decorada con tonos tierra de arena y verde salvia, se encuentra de camino a la original —y aún floreciente— Iglesia de Johannesburgo, la primera Iglesia Ideal de Scientology.
El Fundador de la Iglesia de Scientology L. Ronald Hubbard hizo de Johannesburgo su hogar durante un corto periodo de tiempo, desde 1960 hasta 1961, donde dirigió movimientos tempranos contra el apartheid y declaró: “El sur de África dará fruto a la siguiente gran civilización de este planeta”.
La gran ceremonia de inauguración comenzó con los mágicos sonidos de los tambores africanos acompañando a bailarines y cantantes. Más tarde, los 150 miembros del staff de la Iglesia entonaron una alegre interpretación de Shosholoza: una canción tradicional zulú, que se traduce como “Yendo hacia adelante”.
Ir hacia adelante fue un tema común entre los oradores invitados. Estos incluían a: el Jefe Fanie del Consejo Tradicional Zalisidinga Africano; el Sr. Martin Mande, Asesor de las Naciones Unidas para la Agencia de Refugiados, Sudáfrica; la Sra. Amy Fakude, Portavoz Emérita del Parlamento de Mujeres de la Provincia de Gauteng; y el Pastor Errol Jacobs de los Ministerios Eldorado. Cada uno habló de su interacción fortuita con los feligreses y voluntarios que participan en los programas de la Iglesia.
El Jefe Fanie, le contó a la multitud sus experiencias con la Tecnología de LRH: “Me topé por primera vez con su tecnología mientras trabajaba en los barrios que rodean Johannesburgo —dijo—, a pesar de lo sencillas, estas herramientas fueron trayendo confianza, decencia y honor a estas personas…, fue como magia".
El Sr. Martin Mande recordó el espíritu del héroe africano Nelson Mandela. “Una buena cabeza y un buen corazón siempre son una combinación formidable”, comentó, y habló sobre la importancia de la Declaración Universal de Derechos Humanos de la ONU, que la Iglesia enseña a los niños a lo largo de África, y alrededor del mundo. “Para los scientologists, no se trata de hablar, todo gira en torno a la aplicación, las acciones”, dijo a la multitud.
La portavoz emérita Sra. Amy Fakude, hizo mención de El Camino a la Felicidad de L. Ronald Hubbard y su capacidad para dar poder a una generación: “Antes, las chicas de tan solo 12 años quedaban embarazadas. Ahora, están protegidas por su recién descubierta integridad propia. Y donde los jóvenes creían que robar estaba bien porque ‘ellos estaban retomando lo que originalmente era suyo’, pues bien, ahora están retomando su autoestima. Se los digo, con El Camino a la Felicidad le estamos devolviendo a la Humanidad su humanidad”.
El pastor Jacobs es hijo y nieto de pastores, uno de siete hombres de vocación religiosa en su familia. Todos han visto la decadencia de la moralidad en sus comunidades, y tiene “padres, escuelas, directores” que acuden a él buscando ayuda. “Hace unos pocos años, no podría haberles dicho…, pero ahora sé, y eso es una bendición…, ¡porque descubrí Dianetics y la Iglesia de Scientology, y todo lo que ustedes están aportando a este mundo!”.
El Sr. Miscavige, acompañado por los feligreses locales que estuvieron a la vanguardia de hacer de la nueva Iglesia una realidad, cortaron el gigante listón rojo para inaugurar oficialmente la Iglesia, y miles de personas entraron en los edificios para maravillarse del resplandor y la energía en su interior.
Bendición Africana
Líderes tribales, representantes de gobierno y dignatarios prometen su continua asociación por el futuro del sur de África.
Difundiendo el Mensaje
“Nosotros predicamos y enseñamos, solo para ver cómo el mundo desaparece a nuestros pies. Padres, escuelas, directores, acuden a mí y me dicen: ‘Por favor pastor, necesito su ayuda’. Pero, ¿a dónde los dirijo? Pues bien, hace apenas unos años, no podría haberte dicho a dónde o a quién, pero ahora lo sé, y es una bendición. Porque encontré Dianetics y la Iglesia de Scientology, y todo lo que están aportando a este mundo”.
Dando Poder a la Gente
“Conocí su tecnología por primera vez mientras trabajaba en las poblaciones que rodean Johannesburgo. Estas herramientas estaban trayendo confianza, decencia y honor a estas personas…, parecía magia. Así que empecé las clases yo mismo y paso a paso, ustedes me enseñaron esta ‘magia’. Y muy pronto, supe que tenía el poder para ayudar a mi pueblo, ya que después de estudiar los 19 cursos, me he vuelto el Jefe con todas las respuestas”.
Elevando las Almas Hacia los Derechos Humanos
“Mientras otros están estáticos en su modo de pensar, ustedes son visionarios revolucionarios. Ustedes están elevando las almas hacia los derechos humanos. Ahora debemos establecer clubes de derechos en todas partes, en las escuelas, en las iglesias y organizaciones de cada comunidad. Y así, de esa manera, desde su cabeza hasta su corazón, África puede estar viva y libre con un futuro de derechos humanos”.
Restaurando el Respeto Propio
“Los jóvenes entre las edades de 19 y 35 son la generación posterior al apartheid y El Camino a la Felicidad es su respuesta. Antes, las chicas tan jóvenes como de 12 años quedaban embarazadas. Ahora, están protegidas por su recién descubierta integridad propia. Y donde los jóvenes creían que robar estaba bien porque, ‘ellos estaban retomando lo que originalmente era suyo’, bueno, ahora están retomando el respeto por sí mismos. Se los digo, con El Camino a la Felicidad le estamos devolviendo a la humanidad su humanidad”.